La Roca y el Cometa.

Esta es una historia, que tiene su historia.

Hoy, por equis circunstancia estoy bastante inspirado, y podría decirse que con la musa a mil.

Esta historia la inspiró una hermosa mujer, como creo que a todos nos ha tocado una.

Estoy en la oficina, iba a dejar para transcribirla después, pero me duele mucho lo que acabo de leer.

Suficiente con la introducción.

Erase una vez, en un bosque de arboles altos, tan altos que era poca la luz que lograba tocar el suelo. Eran una clase de pinos, de esos que son de tallo largo, y comienza su ramaje después de bastante altura.

Entre tanto árbol, existía un claro dentro del bosque, la hierba era verde, nacían las flores.
Era como un oasis de sol. Era el único lugar con plantas radiantes, beneficiadas por la fotosíntesis. Podían los pajaros venir a posarse sobre ellas.

Habia una roca, gris, viviendo su eterna adherencia a la tierra. Pensaba en que tenía todo en la vida, un buen soporte, un sol radiante y la mayor dureza.

Sin embargo, era una roca con sueños! Quería ser algún dia conocida no solo por ser la mas fuerte, quería volar. Sin siquiera conocer lo difícil de su sueño, lo fantaseaba todos los días. Ella se sentía diferente a lo que la rodeaba.

Soñaba con ver los arboles por encima, sentir la brisa fría. Sentir el vértigo del que hablaban las aves que venían a posarse sobre ella. Ella, por haber visto el sol, era diferente. Nadie la entendía.

Cierto día pasaron unos campistas, a pernoctar en el claro del bosque. Y entre tantas cosas que hicieron ataron una cometa a la roca, olvidándola allí.

La cometa, era hermosa, con muchos colores y listones de seda, volaba tan alto que de vista se perdía. Al verse tan alta, ondeaba su cola con orgullo.

Radiante en los cielos era admirada por todos, asombraba a la mayoría la belleza que tanta libertad impartía.

Acostumbrada a volar libremente, pensaba que sería un dia mas de vuelo, y pues se lució como siempre lo hacía.

De la nada, comenzó a formarse una nubosidad sobre el bosque, los arboles comenzaron a batirse, el sol se escondió tras las formaciones de agua.

La roca acostumbrada a este tipo de eventos en su vida de piedra, no tuvo mayor revuelo; solo con ser quien la vida le había enseñado de la manera mas dura a ser, tenía.

Pero esta vez, algo cambió.. recordó que la cometa había sido fortuitamente por la vida unida a ella, y sentía cierta responsabilidad sobre su seguridad.

La cometa, al ver tanta brisa fuerte, tanta oscuridad, sintió que ya era hora de ser rescatada. Dentro de poco su hilo sería halado y pues, regresaría segura a tierra.

La tormenta siguió su curso, y la cometa se vió asustada, pero nunca fue devuelta a tierra.

La roca, comprometida con su primera misión de la vida mas allá de ser una combinación de minerales sin vida, aguantó la presión. Y fue quien vino a este mundo a ser.

Al salir de nuevo el sol, la cometa siguió volando aunque un poco desconcertada sobre como logró superar tan inclemente situación.

Se dio cuenta que estaba atada a la roca mas fuerte del bosque, y que ella la mantuvo estable mientras pasaba lo peor.

La cometa le contaba historias de los cielos, le traía mensajes de los pájaros, le describía cada uno de los cirros, le ilustraba con encanto la forma de vida extraordinaria en el aire.

Había cometido tantas locuras en la vida, volado por tantos lugares, que le contaba una historia diferente cada vez.

La roca le enseñaba a la cometa a tener temple, a ser fuerte ante las adversidades, y que todos tenemos una vida extraordinaria preparada, solo tenía que aprender a disfrutarla.

La gente veía desde lejos, por encima de los arboles, la belleza de la cometa al volar, estaba gloriosa y feliz, asombraba a todos con su baile, podía cometer cualquier locura.

Estaba siendo ella misma, pues tenía a su mejor compañera de vuelo.

La roca se sentía plena, además de haber pasado su vida preparándose para ser feliz consigo misma, su forma de ser había servido para cumplir sus sueños, de experimentar el aire.

La felicidad de cada uno complementaba la del otro, unidos por un hilo casi invisible, pero tan fuerte para soportar las muchas tormentas por las que atravesaron.

Sus vidas cambiaron al conocerse, la cometa era a su plenitud inmensa, finalmente pudo volar como quisiera, sin cohibiciones, viviendo una hermosa vida. La roca finalmente sintió que su experiencia era valiosa, y era alimentada por la felicidad que le causaba a su compañera.

La cometa fue libre, la roca voló.

Esta historia, me ayuda mucho en mi día a día, por los simbolismos y metáforas que incluye.

El hilo que las une, tiene muchas interpretaciones. Para mi generalmente es el amor. Pero a veces se ha convertido en confianza, o también en costumbre.

Solo quiero decir, consigue tu felicidad plena.